La historia de Santa Rita está plagada de hechos milagrosos. Se dice que de niña abejas blancas (hoy conocidas como abejas de Santa Rita), depositaban miel en su boca para alimentarla, y sin hacerle daño. Otro hecho curioso, narra que en los últimos días de su vida Santa Rita solicitó a una pariente que la visitaba, que por favor le llevará una rosa del jardín del convento a su habitación.
Existen muchas oraciones dedicadas a Santa Rita de Casia para obtener su protección durante las dificultades o conseguir una gracia, a través de su divina intervención. A continuación, se transcribe una de las oraciones más conocidas, de autor anónimo y difusión popular.
Oración a Santa Rita de Casia
Santa de lo Imposible. Oh Santa Patrona de los necesitados, Santa Rita, cuyas plegarias ante el Divino Señor son casi irresistibles, quien por la generosidad en otorgar favores has sido llamada Abogada de los casos desesperados, y Mediadora de los sin esperanza.
Santa Rita, tan humilde, tan pura, tan mortificada, tan paciente y de tan compadecido amor por Jesús Crucificado, que podrías obtener de Él cualquier cosa que le pidas.
A cuenta de esto recurro confiado a ti, esperando, si no siempre alivio, al menos consuelo. Se favorable a mi petición, mostrando el poder de Dios a nombre de tu suplicante.
Te pido, sé generosa conmigo, como lo has sido en tantos casos maravillosos, para la más grande gloria de Dios, por la divulgación de tu propia devoción, y por el consuelo de aquellos que confían en ti.
Prometo, si mi petición es concedida, glorificar tu nombre, informando del favor concedido, para bendecir y cantar tus alabanzas por siempre. Confiando entonces en tus méritos, ante el Sagrado Corazón de Jesús, te ruego XXXX (mencionar lo solicitado).
Por los singulares méritos de tu infancia; por la perfecta unión con la Divina Voluntad; por los heroicos sufrimientos durante tu vida de casada; por el consuelo que experimentaste con la conversión de tu esposo; y por el sacrificio de tus niños antes de verlos ofender gravemente a Dios.
Por tu milagrosa entrada al Convento; por las austeras penitencias y las sangrientas ofrendas tres veces al día; por el sufrimiento causado por la herida que recibiste, con la espina del Salvador Crucificado; por el amor divino que consumió tu Corazón; y por tu notable devoción al Sagrado Sacramento.
Por la felicidad con la cual partiste de tus pruebas, para reunirte con el Divino Esposo; y por el ejemplo perfecto que diste a la gente, en cada estado de tu vida. Santa de lo Imposible, te suplico, atiende mi petición.
Amen.
Finalizar la plegaria, recitando 3 Padres Nuestros y un Gloria.
Para agradecer a Santa Rita de Casia la ayuda concedida, se recomienda colocar rosas rojas frente a su imagen, y hacer donaciones a los desposeídos, durante su festividad (22 de mayo). No tiene que ser algo suntuoso, con un pequeño gesto honraras su memoria.
Articulo con fin de lectura.
