En el año 1858, la localidad de Lourdes era una muy pequeña aldea con casas humildes, como así también sus habitantes, que en un ochenta por ciento eran analfabetos. Hoy junto a esa Gruta de las Revelaciones se alza un santuario y un lugar de peregrinación. La Gruta y la Basílica de la Inmaculada Concepción (construida por Monseñor Laurence, obispo que acogió las revelaciones privadas a santa Bernadette Soubirous), constituyen el santuario original. Posteriormente, todo el conjunto de templos y edificios que tienen como centro la Gruta mencionada recibieron el nombre de Santuario de Nuestra Señora de Lourdes.
Aquí la hermosa oración especial a nuestra Señora De Lourdes para el alivio de la enfermedad
¡Oh amabilísima y hermosa !
Llenos de sta triste aflicción y con lágrimas brotando nuestros ojos,
acudimos en las horas tan amargas de esta enfermedad a tu maternal y tierno corazón,
para pedirte que derrames a manos llenas¿
el tesoro de tu misericordia sobre nosotros.
Indignos somos todos nosotros por nuestros pecados pero te rogamos que nos escuches,
Pero acuérdate que jamás se ha oído decir
que ninguno de todos los que han acudido padeciendo a ti haya sido abandonado y o escuchado.
¡Madre tierna! ¡Madre bondadosa! ¡Madre dulcísima! ¡Madre amorosa!
Ya que Dios obra por tu mano haciendo curaciones sin cuento en la Gruta prodigiosa y bendecida de Lourdes,
sanando tantas víctimas del dolor, guarda y otorga también, una mirada de bendición para nuestro pobre enfermo en cama…
(se dice el nombre).
Alcanzale e intercede por nosotros ante vuestro Divino Hijo Jesucristo y así podremos alcanzar la tan deseada salud, si ha de ser esta para la mayor gloria de Dios.
Pero mucho más alcanzarnos a todos nosotros el perdón de nuestros horribles pecados, paciencia y resignación en los sufrimientos y sobre todo y más aún, un amor grande y eterno a nuestro Dios Padre, prisionero por nosotros en los Sagrarios.
Amén.
Recuerda siempre orar con el corazón lleno de amor y ternura, vacío de malos sentimientos, acompaña esta hermosa oración de un Ave maria Padre nuestro.
Articulo con fin de lectura.
