Cada que tengas un pesar, es un buen tiempo para realizar una petición de amor o salud. Reza esta oración a la divina providencia completa, cada que sientas que todo vienen abajo, verás como eres reconfortado.
Oración a la Virgen de la Divina Providencia
Bendita Virgen María Inmaculada, Madre Castísima de la Divina Providencia, protege por favor mi alma con la plenitud de tu gracia; gobierna mi vida y dirígela por el camino de la virtud al cumplimiento de la voluntad divina.
Alcánzame el perdón de mis culpas. Por favor sé mi refugio, mi gran protección, mi mejor defensa y mi guía en la peregrinación por este mundo. Consuélame por favor en mis tristes aflicciones, protégeme en los peligros, y en la tempestades de mi adversidad, ofreceme tu segura tutela.
Alcánzame, ¡Oh Maria!, la gran renovación interior de mi adolorido corazón para que se convierta en una bella morada santa de tu divino Jesús. ahuyenta de mi que soy débil, toda clase de pecado, de descuido, de flojera, de debilidad y de respeto humano.
¡Oh, dulcísima Madre de la Divina Providencia! Enfoca hacia mí tu mirada protectora y maternal y si por fragilidad o por malicia he provocado las amenazas del eterno juez, y he amargado el corazón sacratísimo de mi amado Jesús, cúbreme con el manto de tu protección y seré salvo.
Tú eres una bella madre misericordiosa; tú, la bendita virgen del perdón; tú, mi esperanza en la tierra. Haz que pueda yo tenerte por favor por madre en la gloria del cielo.
Amén.
Himno a la Virgen de la Divina Providencia
Virgen Santa de la Providencia Madre de Clemencia, Honor del Caribe. Protectora, Borinquen te aclama. Patrona te llama y a tu amparo vive.
Los Boricuas, tus hijos amados, llegan confiados a buscar los bienes, que les brinda con todo el cariño, por tu mano, el niño, que en tus brazos tienes.
Ese niño que reposa en calma, despierto en el alma en Borinquen sueña. Y se alegra de que hayas querido por trono escogido, tierra Borinqueña.
Puerto Rico, te tiende su brazo, solo en tu regazo, descansar añora, y te pide, que sigas constante, siendo en cada instante su fiel protectora.
Articulo con fin de entrtenimiento y lectura.