Quiero que sepan que soy la misma mujer de antes,
solo con unos años de más, unas arrugas en mi cara,
cicatrices en mi piel, en fin…
Lo que sucede con el transcurso del tiempo,
ese tiempo que te enseña a valorar
lo que realmente vale la pena,
lo que necesitas dejar atrás,
por lo que necesitas luchar.
Soy la misma mujer de antes,
solo que ahora me escucho,
sé lo que valgo, lo que quiero
y lo que merezco.
Soy la misma mujer de antes,
solo que ahora me amo más
y soy feliz sin depender de nadie.